Opinión Política
ANÁLISIS

Rumbo a Casa Jalisco no hay mañana

Un candidato y dos candidatas contenderán por la gubernatura, en una carrera electoral que pondrá a prueba la unidad de las militancias, la organización de los partidos y el peso de los aspirantes presidenciales en Jalisco.

 

Por Julio César Hernández

Estamos a cuatro días de que arranquen las campañas al gobierno del Estado para suceder a Enrique Alfaro Ramírez, y el y las contendientes se han colocado ya en la línea de salida en medio de una “guerra de encuestas” en las que se alterna el nombre de quien según la casa encuestadora en turno va adelante en la preferencia de los jaliscienses.

Para muchos la verdadera contienda, hombro con hombro, estará entre el candidato del partido del gobierno, Movimiento Ciudadano, Jesús Pablo Lemus Navarro, y la abanderada de la coalición Sigamos Haciendo Historia, Claudia Delgadillo González. En una tercera posición aún muy lejana de la segunda se encuentra la candidata de la otra coalición, Fuerza y Corazón por Jalisco, Laura Haro Ramírez.

A principios de la semana pasada, la empresa C&E Research publicó su encuesta telefónica en la que Lemus Navarro registraba una preferencia del 48% contra el 37% de Delgadillo González y el 11% de Haro Ramírez. Ese mismo día la casa encuestadora Rubrum reveló su encuesta -también telefónica- con resultado contrario: Por Claudia Delgadillo se pronunció el 43.6%; por Jesús Pablo Lemus el 32.1%; y por Laura Haro un 11.5%. La más consistente en ambas encuestas fue la ex dirigente del PRI, pero con más de 20 puntos de desventaja respecto al segundo lugar en ambas mediciones.

Lo que también es una constante en cualquier medición electoral en Jalisco es la preferencia que registra Morena como partido, y Claudia Sheinbaum Pardo, como su candidata a la presidencia de la República, con una amplia ventaja sobre Xóchitl Gálvez Ruiz. La firma C&E Research registró una simpatía partidista del 41% por Morena y el 36% por Movimiento Ciudadano, en tanto que el 46% se pronunció a favor de Sheinbaum; el 31% por Gálvez; y apenas un 3% por el candidato presidencial de MC, Jorge Álvarez Máynez. Y en la encuesta difundida por el Grupo Reforma a mediados de febrero, en la que Lemus (49%) aventaja con once puntos a Delgadillo (38), Claudia Sheinbaum registra una preferencia del 69% contra el 32% de Xóchitl Gálvez y el sólo 8% de Jorge Álvarez.

Lo importante y trascendente de los números en la carrera presidencial en Jalisco, está en conocer si tendrán un efecto “cascada” en la elección por la gubernatura, porque entonces podrían repercutir en la votación a favor de Claudia Delgadillo y Laura Haro, si nos atenemos a las dos candidatas presidenciales, pero ante el débil candidato a la presidencia de Movimiento Ciudadano y la tercera posición en que se ubica a la candidata priista, se comenzó a promover el llamado “voto útil” en el que se invita a votar por Gálvez a la presidencia y por Lemus a la gubernatura, tal y como desde hace meses atrás se promueve en espectaculares de los que nadie se ha hecho responsables y ante los que el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) se ha “hecho de la vista gorda”.

MORENISTAS. La unidad entre la militancia será factor determinante.

EL FACTOR PRESIDENCIAL

Una de las preguntas que reinan en el ambiente electoral en Jalisco es cuál será el peso de las candidatas y el candidato presidencial en las elecciones locales y los efectos que tendrán sobre él y las aspirantes a la gubernatura estatal, pues en la pasada elección presidencial no tuvo el efecto del 2000, del 2006 y del 2012 cuando ganaron la presidencia y la gubernatura los candidatos del mismo partido.

En el 2000 ganó la presidencia Vicente Fox y la gubernatura Francisco Ramírez Acuña; en el 2006 llegó a Los Pinos, Felipe Calderón Hinojosa y a Casa Jalisco, Emilio González Márquez; mientras en el 2012 ganó la presidencia de la República, Enrique Peña Nieto, y aquí la gubernatura Jorge Aristóteles Sandoval Díaz.

En el 2018 se rompió este efecto, pues mientras Andrés Manuel López Obrador ganó la presidencia como candidato de Morena, aquí perdió la contienda por la gubernatura el morenista Carlos Lomelí Bolaños frente a Enrique Alfaro Ramírez postulado por Movimiento Ciudadano.

Ahora, entre quienes aspiran a la presidencia de la República y quienes lo hacen a la gubernatura se avizora que sólo podría haber una coincidencia del mismo partido o coalición, que sería el caso de Sigamos Haciendo Historia, pues se advierte lejano que pudiera presentarse en las otras dos candidaturas, la de Movimiento Ciudadano y la de la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco.

O sea que no se descarta un triunfo de Claudia Sheinbaum y Claudia Delgadillo, ambas postuladas por la coalición Sigamos Haciendo Historia, mientras que no se augura un triunfo de Álvarez Máynez y Lemus Navarro y de Gálvez Ruiz y Haro Ramírez. En estos dos casos, o gana uno o el otro. En el caso emecista, se observa una alta posibilidad de triunfo del candidato a la gubernatura y muy baja del candidato presidencial, en tanto que en el caso de la segunda coalición se apuesta por una posible victoria de la aspirante presidencial y una muy lejana posibilidad de que lo logre la candidata a la gubernatura.

Pero en político nada puede darse por decidido y a nadie puede darse “por muerto”, pues bien dicen que en este terreno “hasta los muertos gozan de cabal salud”.

Por eso la importancia de analizar el peso que tendrán las candidaturas presidenciales en la elección por la gubernatura, pues en este renglón aventajan las dos candidatas, Claudia Delgadillo y Laura Haro, mientras que Pablo Lemus estaría en desventaja por la debilidad del candidato presidencial de su partido.

TRICOLORES. Priistas, panistas y perredistas juntos por hacer el mejor papel electoral.

“UN DIRIGENTE POLÍTICO RESPETABLE DEBE BASAR SUS ACCIONES EN EL CUMPLIMIENTO DE SU PALABRA. LAMENTABLEMENTE PARA EL @PRI_NACIONAL NO ES EL CASO DE @ALITOMORENOC, QUIEN A TRAVÉS DEL ENGAÑO Y LA TRAICIÓN LO HA SECUESTRADO PARA SU BENEFICIO Y EL DE SU CAMARILLA DE INCONDICIONALES”.
JOSÉ SOCORRO VELÁZQUEZ / EX PRESIDENTE ESTATAL DEL PRI

EL FACTOR UNIDAD

Otro factor que será determinante y tendrá un protagonismo importante es la unidad en los partidos contendientes y particularmente en torno al candidato y a las candidatas. En este renglón, Lemus Navarro, Delgadillo González y Haro Ramírez “cojean” del mismo lado, pues hasta ahora ninguno puede presumir que su candidatura está “cobijada” por esa unidad que en apariencia pudiera advertirse que existe en Movimiento Ciudadano porque definió sus candidaturas en buen tiempo, mientras que en las coaliciones Fuerza y Corazón por Jalisco y Sigamos Haciendo Historia la tardanza en la revelación de los nombres de sus candidatos ha generado toda una serie de divisiones y enfrentamientos públicos y “por debajo de la mesa”.

Si bien en Movimiento Ciudadano cuatro de los cinco aspirantes a la candidatura al gobierno del Estado se hicieron a un lado para que Jesús Pablo Lemus fuera postulado como candidato único, no todo el emecismo identificado con el alfarismo o el llamado Grupo Jalisco se ha sumado a dicha candidatura, aunque no se ha manifestado abierta y públicamente como se manifiesta “en corto”. Sin embargo, también del lado del equipo del candidato se han advertido señales de resistencia a integrar a ese emecismo que algunos llaman “originario”.

Algunos consideran que al paso de la campaña se logrará la ansiada unidad, aunque otros la condicionan, precisamente, a cómo transcurra precisamente esta campaña. Se cierra o se abre ese desencuentro.

Pero además de lo anterior, Movimiento Ciudadano sigue registrado la salida o renuncia de militantes o simpatizantes que no fueron tomados en cuenta por quienes fueron designados candidatos y sus equipos, como es el caso más reciente de David García Camarena en Tlaquepaque, aspirante a la candidatura a la presidencia municipal, pero quien junto con su equipo fue “congelado” desde años atrás por quien mantiene el control político “naranja” en la ex Villa Maicera, la ex alcaldesa y diputada federal María Elena Limón García, de quien por cierto fue síndico en su primera administración y a partir de ahí comenzó a relegarlo. El grupo de García Camarena le abre un serio “boquete” a MC en este municipio que muchos ya ven en manos de Morena.

El caso de la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco puede ser más preocupante, pues a su posición en la tabla -tercer lugar- se suma la desbandada de no pocos militantes del PRI inconformes por la falta de oportunidades para ser candidatos, ir en las planillas municipales o simplemente el incumplimiento de compromisos asumidos previo al “destape” de candidatos. Esto, por supuesto, debilita aún más a la alianza.

La semana pasada se registraron dos hechos que mostraron claramente el ambiente que reina al interior del Revolucionario Institucional. El primero, el ex presidente estatal del partido, varias veces diputado local y federal, y con una larga trayectoria política, José Socorro Velázquez, subió a su cuenta en “X” el siguiente texto: “Un dirigente político respetable debe basar sus acciones en el cumplimiento de su palabra. Lamentablemente para el @PRI_Nacional no es el caso de @alitomorenoc, quien a través del engaño y la traición lo ha secuestrado para su beneficio y el de su camarilla de incondicionales”.

Aunque se mantiene dentro y como militante del PRI, “Coco” Velázquez reveló luego que no participará en ninguna actividad del partido mientras estén al frente los actuales dirigentes, Alejandro Moreno, nacional, y Antonio Padilla, estatal, ni tampoco en ningún acto de campaña de Laura Haro Rodríguez, luego de que como ex dirigente asistió a las reuniones convocadas por la propia Haro Ramírez cuando presidía al partido.

El segundo caso es el de la propia Laura Haro, quien el sábado sorprendió a más de uno al subir a sus redes sociales un texto calificado por propios extraños como “rudo” e innecesario. Escribió:

“¡Bonito sábado! Hoy quiero agradecer a los partidos de oposición por ser el basurero de lo peor de lo peor; gracias en verdad por llevarse a las y los más impresentables. Qué lástima que utilizaron nuestras siglas para ocupar posiciones pero lo bueno es que se fueron porque aquí ya no iban a tener oportunidades. GRACIAS”.

Las críticas por su comentario no se hicieron esperar en contra de Haro Ramírez en redes sociales. Faltará ver las consecuencias que tenga y si ya se terminó la desbandada de militantes.

Donde ya no extraña la desunión de la militancia es en la coalición Sigamos Haciendo Historia, que ha sido más intensa por la falta de definición de las candidaturas y que, a decir de algunos militantes y analistas, es lo que ha motivado la inconformidad al interior, principalmente de quienes son militantes de Morena y se inconforman porque las candidaturas se entregan a personajes de otros partidos, aún y cuando son parte de la propio coalición como el Verde, Del Trabajo, Hagamos o Futuro, o a quienes desertan de otros partidos como Movimiento Ciudadano, PAN o PRI. El reclamo es “por derecho de antigüedad”, según cuentas diversos morenistas.

La apuesta de los más optimistas en los partidos que integran esta coalición es que definidas estas candidaturas faltantes la militancia cerrará filas ante las altas posibilidades que se tienen de ganar la elección a la gubernatura, diputaciones y alcaldías, apostándole a que la candidata Delgadillo González y la candidata presidencial, Claudia Sheinbaum, provocarán un efecto “cascada” en las boletas electorales.

Pero hay pesimistas que consideran lo contrario, que pueden quedar muchos “dolidos” o lastimados y sin tiempo para implementar con éxito una “operación cicatriz”, que votarían en contra o simplemente no ir a votar.

EMECISTAS. El ánimo de los simpatizantes “naranjas” puede redituarles ganancias.

NO HAY MAÑANA

Lo que queda claro en esta contienda por la gubernatura y la mayoría legislativa y de alcaldías, es que no hay mañana para los contendientes y que todo dependerá del trabajo que se haga en los 90 días de campaña que se presumen serán intensos y en los que no habrá tregua alguna para echar mano de todos los recursos que unos y otros dispongan para debilitar al rival.

No hay elementos para descartar que no se desatará la “guerra sucia”, como suelen llamarle a los ataques o agresiones verbales y, principalmente, a través de las redes sociales, entre los contendientes y sus equipos de colaboradores. Incluso, no se descarta que avanzada la campaña puedan darse alianzas de “facto” con el propósito de que alguno de los “punteros” no logre la victoria el próximo dos de junio.

A partir del próximo viernes uno de marzo la “moneda” electoral será lanzada al aire y no caerá hasta el domingo dos de junio, cuando no sólo se conozca el índice de participación ciudadana en el país y Jalisco, y por la noche comencemos a conocer los resultados de las encuestas de salida y del avance del Programa de Resultados Preliminares (PREP).

Mientras tanto, se anuncia un espectáculo electoral a lo largo de los próximos tres meses.

 

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