NOTA DEL EDITOR
Por Julio César Hernández
@jcentresemana
Bien dice el refrán: “No hay plazo que no se cumpla ni fecha que no se llegue”.
El viernes de esta semana seremos testigos del arranque de campaña de seis aspirantes a la presidencia de la República y al gobierno de Jalisco. Dos mujeres y un hombre en ambas elecciones. Por la presidencia: Jorge Álvarez Máynez, Xóchitl Gálvez Ruiz y Claudia Sheinbaum Pardo; por la gubernatura: Claudia Delgadillo González, Laura Haro Ramírez y Jesús Pablo Lemus Navarro. Así, en estricto orden alfabético.
Para ellos, para los aspirantes a senadores de la República y diputados federales no hay mañana. Los candidatos al Congreso del Estado y a las presidencias municipales la fecha de arranque es el último de marzo.
El hoy comienza el primero de marzo cuando los seis candidatos a ser titular del Ejecutivo federal y estatal concentren a sus simpatizantes y emitan su primer discurso que, sin duda, darán directrices de hacía dónde pretenden ir en estos 90 días de campaña proselitista en busca de ganarse el voto ciudadano. Y pese a que cada tercia contiende por un nivel de gobierno diferente, la demanda ciudadana para ambas en todo el país es una sola: Seguridad, así con mayúscula. Se viva donde se viva, la inseguridad pública azota cada rincón del país, en unos lugares más que en otros, pero en muchos la sangre corre todos los días. No hay descanso para sus habitantes.
Sheinbaum Pardo iniciará su campaña en su territorio, la Ciudad de México, mientras Gálvez Ruiz irá a un terreno prestado por el partido que la ha postulado a los diversos cargos que ha ocupado sin ser militante: Guanajuato, donde el PAN se mantenido en el poder por espacio de tres décadas, desde aquella concertacesión de Carlos Salinas de Gortari que permitió el arribo no de Vicente Fox Quesada que fue el candidato a la gubernatura sino de Carlos Medina Plascencia, un empresario zapatero que se “sacó la lotería” sin comprar boleto. El arranque de Álvarez Máynez es un misterio en el momento de redactar estas líneas. Quizás el fin de semana ya se dio a conocer.
Aquí en Jalisco la contienda por la gubernatura estará cerrada entre dos contendientes: Movimiento Ciudadano, con Lemus Navarro en la batalla, y la coalición Sigamos Haciendo Historia, encabezada por Morena, aunque su candidata hoy forma parte de la bancada legislativa del partido Verde Ecologista de México. Laura Haro, candidata de la otra coalición, Fuerza y Corazón de Jalisco, sin duda que saldrá a hacer su mejor papel y demostrar que, pese a su juventud, es una política que está lista para comenzar a destellar en las ligas mayores.
Es muy aventurado atreverse a pronosticar a estas alturas a un posible ganador como se pudo hacer en contiendas anteriores, pues desde la línea de salida la carrera es pareja entre los “naranjas” y los “multicolores” de la llamada mega alianza. Una contienda en la que los errores pueden tener un alto costo para quien los cometa, y en donde un mal mensaje, una frase o idea mal enviada, puede echar a la borda todo lo que pudo construirse ya.
A las candidatas y candidatos les quedan estos últimos cuatro días de febrero para afinar detalles, porque a partir del viernes uno de marzo, ya no hay camino de retorno, ya no hay vuelta, ya no hay “borrón y cuenta nueva”. Todo lo que se haga o se deje de hacer sumará o restará a las aspiraciones de los contendientes. Y así muchos se han quedado en el camino.
Los ciudadanos tendrán que tener paciencia para asimilar la enorme cantidad discursiva que recibirá tarde, día y noche; los ataques, agresiones, “golpeteo” y todo aquello válido en una “guerra” electoral y, en ocasiones, hasta lo que no. Pero finalmente todo eso “pintará” a los candidatos “de cuerpo completo”.