Charlas en la Cafetería del Barrio
Por Alberto Mora
@alberto_mora
-La justicia selectiva es un concepto que ha generado debate en el ámbito jurídico y político.
“Un ejemplo claro de justicia selectiva es cuando un político influyente es acusado de corrupción, pero no se le procesa debido a su posición, mientras que una persona común sí es procesada por un delito similar. Esto crea una percepción de impunidad y socava la confianza en el sistema judicial.
“La impunidad es un problema grave que debe abordarse de manera efectiva para garantizar la justicia y el Estado de Derecho. Es fundamental que las instituciones encargadas de administrar justicia actúen con independencia y transparencia. Que se promueva una cultura de responsabilidad y rendición de cuentas. Solo así se podrá construir una sociedad justa y equitativa para todos”.
Así arranca la charla en la cafetería del barrio “El Profe”. Cafetero de afición y académico de profesión, con un grupo de compañeros intercambia puntos de vista degustando cafés mexicanos de la mejor calidad, tostado por el Taller de Espresso.
-Si me permiten -continúa su charla “El Profe”-, intentaré explicarles mi interpretación de la justicia selectiva, invitándoles a reflexionar sobre el perjuicio social que puede generar.
“La Justicia Selectiva se refiere a la aplicación sesgada de la ley donde se selecciona qué casos perseguir o castigar, basándose no en la igualdad ante la ley sino en criterios arbitrarios como la posición social, el poder político o económico de las personas involucradas.
“La justicia selectiva va en contra del principio fundamental de igualdad ante la ley. Ya hace muchos años, pensadores como Max Weber y Michel Foucault señalaban la importancia de la imparcialidad en la aplicación de la ley para garantizar la legitimidad del sistema judicial.
“Según Weber, la justicia debe ser una «jaula de hierro» que limite el poder arbitrario, mientras que Foucault ha argumentado que el sistema judicial puede ser una herramienta de control social si se utiliza de manera selectiva para perseguir a ciertos grupos o individuos.
“Cuando la ley se aplica de manera sesgada, se socava el Estado de derecho y se debilita la democracia. Además, puede contribuir a la polarización y al resentimiento social, alimentando un ciclo de injusticia y descontento.
“La justicia selectiva tiene un impacto negativo en la sociedad. Genera desconfianza en las instituciones, fomenta la impunidad y puede perpetuar desigualdades estructurales”.
Martha, compañera de cátedra de “El Profe”, interrumpe para solicitar otra ronda de cafés y enriquecer la charla con las siguientes consideraciones:
-La impunidad es un fenómeno que socava la justicia y el Estado de Derecho. Me refiero a la falta de castigo o de consecuencias legales para quienes cometen delitos y/o abusos. Esa corrupción que le da vida, alimentada por complicidades o, en el mejor de los casos por la falta de voluntad política, la nula prevención del delito y la ineficacia del sistema judicial.
“La impunidad va en contra del principio de justicia y equidad. Autores como Hannah Arendt y Giorgio Agamben han explorado la relación entre el poder y la impunidad.
“Arendt argumentó que la impunidad puede surgir cuando los individuos se desvinculan de sus actos, mientras que Agamben ha señalado cómo la impunidad puede convertirse en un estado de excepción que socava las libertades individuales.
“Tenemos registro de incontables casos de funcionarios públicos o personas influyentes que cometen delitos graves como corrupción o abusos de derechos humanos y no son procesados, mucho menos condenados debido a su estatus o poder. Esto crea un clima de desconfianza en las instituciones y puede perpetuar la impunidad en otros casos similares.
“La impunidad tiene un impacto devastador en la sociedad. Genera desconfianza en las instituciones, debilita la democracia y perpetúa la violencia y la injusticia.
“Cuando los delitos quedan impunes, se envía el mensaje de que es aceptable violar la ley, lo que puede fomentar la criminalidad y la violencia, perpetuando el ciclo de la violencia y el abuso.
“La justicia selectiva es un fenómeno que plantea serias preocupaciones en términos de equidad y legitimidad del sistema judicial.
“Es fundamental que las instituciones encargadas de administrar justicia actúen de manera imparcial y transparente, garantizando que todos los ciudadanos sean tratados por igual ante la ley. Solo así se podrá construir una sociedad justa y equitativa para todos”.
