En un gesto de apertura política hacia uno de los sectores de mayor influencia pública en México, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo sostuvo un encuentro con integrantes de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT) durante la Convención Nacional de Radio y Televisión 2025, realizada el pasado 12 de noviembre.
Por Ángel Nakamura
En el evento, la mandataria invitó formalmente a la industria a reunirse con la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral, con el fin de revisar los tiempos oficiales asignados a los partidos políticos durante los procesos electorales.
La propuesta fue recibida con interés por los representantes del organismo, cuyo presidente, José Antonio García, aseguró que las más de 1,200 emisoras afiliadas —que juntas cubren el 99% del territorio nacional— están dispuestas a mantener una comunicación abierta, constante y colaborativa con el gobierno federal.
Apertura total al diálogo sobre los tiempos oficiales
Durante su intervención, Sheinbaum reiteró que su administración mantiene una disposición total al diálogo con la industria mediática frente a uno de los temas más sensibles dentro de la operación electoral: la distribución, duración y regulación de los spots que difunden los partidos políticos durante campañas.
“He puesto a discusión abierta de toda la sociedad, a través de una comisión, lo que pudiera llegar a constituirse en una Reforma Electoral”, señaló la presidenta. Convocó al organismo a revisar con la Comisión —encabezada por Pablo Gómez y coordinada por la Secretaría de Gobernación— los llamados tiempos oficiales, particularmente la reiteración de mensajes de 20 segundos que, año tras año, generan fricciones entre el sector mediático, las audiencias y los propios actores políticos.
“Les invito a que tengamos una reunión para hablar de los tiempos que tanto les importan a ustedes: los tiempos de los partidos políticos en la época de elecciones, lo que significa para los propios medios, para la audiencia y para quienes buscan ser reconocidos en la sociedad”, expresó.
El planteamiento fue recibido por parte de directivos y concesionarios, quienes históricamente han considerado que la sobrecarga de mensajes partidistas afecta la programación, la relación con anunciantes y la experiencia del público.
El peso político de los tiempos oficiales
En México, los partidos tienen acceso gratuito a minutos específicos en radio y televisión gracias a los tiempos del Estado, administrados por el INE. Estos espacios son esenciales para que las fuerzas políticas comuniquen plataformas, principios y propuestas, especialmente dado que en el país está prohibida la compra directa de publicidad electoral en medios electrónicos.
La discusión sobre su distribución no es menor: forma parte de un debate más amplio sobre una reforma político-electoral que busca reducir costos —cercanos a los 20 mil millones de pesos anuales— y replantear la estructura representativa del sistema, incluida la eventual elección popular de consejeros electorales y la sustitución del modelo de representación proporcional.
Un llamado a revisar el ecosistema mediático y la influencia de la IA
Más allá de los tiempos oficiales, Sheinbaum aprovechó su intervención para abrir una reflexión de mayor escala: el impacto de los algoritmos, la inteligencia artificial y las plataformas digitales en la opinión pública.
“Es importante debatir lo que hoy representan muchas de estas plataformas que orientan emociones, fragmentan la verdad mediante algoritmos diseñados para maximizar la atención y el consumo”, advirtió, subrayando los retos que estos sistemas representan para la comunicación democrática.
Asimismo, hizo un llamado a los medios a abrirse al debate plural, destacando que la ciudadanía actual demanda información verificable, equilibrada y con multiplicidad de voces.

difunden los partidos políticos.
Compromisos de la industria: colaboración y responsabilidad social
Por su parte, el presidente del Consejo Consultivo de la CIRT, José Antonio García, expresó que el organismo está dispuesto a trabajar de manera coordinada con el gobierno federal y los distintos niveles de administración para fortalecer el ecosistema mediático del país.
“Queremos lo mismo que usted: un mejor México para las y los mexicanos”, afirmó García, subrayando la importancia de la radiodifusión como servicio público, así como el compromiso del sector con las audiencias y con la preservación de la pluralidad informativa.
También pidió, a nombre de la CIRT, que el Estado mexicano garantice condiciones regulatorias parejas para el desarrollo de la industria y así poder seguir dando al servicio público que los mexicanos requieren.
Durante la reunión anual, el empresario señaló la importancia de fortalecer el crecimiento del sector, por lo que entregó a la mandataria una carta con las principales consideraciones del gremio para mejorar su desarrollo y promover la competitividad en medios electrónicos.
Libertad de expresión como eje rector
En uno de los momentos más enfáticos de su mensaje, la presidenta Sheinbaum reiteró que su gobierno no reprime ni censura a los medios de comunicación, y que defender la libertad de expresión es condición indispensable para la vigencia de la democracia.
“No limitamos nunca la libertad de expresión; creemos y confiamos en ella. La defendemos porque sin libertad no hay democracia y sin democracia no hay justicia”, afirmó.
Un puente político en un sector estratégico
El encuentro entre la presidenta de México y la CIRT marca un punto relevante en el debate sobre la reforma electoral y la relación entre el gobierno federal y los medios de comunicación. La disposición al diálogo expresada por ambas partes abre la puerta a una revisión estructural de los tiempos oficiales y al fortalecimiento de un entorno mediático que responda tanto a los retos tecnológicos como a las exigencias democráticas del país.
En un escenario donde la opinión pública se transforma aceleradamente, la negociación entre el Estado y los medios será un componente clave para definir el rumbo institucional y electoral de México en los próximos años.



