Movimiento Ciudadano y las alianzas partidistas enfrentan el problema de la falta de unidad en torno a sus precandidatos. En Morena es más agudo. Se busca que se “limen asperezas” antes de que inicien oficialmente las campañas a principios del año.
Por Julio César Hernández
De “pronóstico reservado” se vaticina será la contienda en Jalisco por la gubernatura en medio de las precampañas ya iniciadas por la candidata de la llamada mega alianza Morena, Partido del Trabajo, Verde Ecologista y los partidos locales Futuro y Hagamos, Claudia Delgadillo González, quien tuvo como “madrina” a la virtual candidata presidencial Claudia Sheinbaum Pardo, y el candidato de Movimiento Ciudadano, Jesús Pablo Lemus Navarro, quien sin padrinazgo alguno ha recurrido al apoyo del aspirante al Senado, Alberto Esquer Gutiérrez, para comenzar su recorrido en el estado.
Mientras tanto, está pendiente que el Frente Amplio por Jalisco, conformado por PAN, PRI y PRD, definan el nombre de su candidata, luego de que se definió que postularían mujer. La designación se ha “frenado” ante las cerradas negociaciones del dirigente del PRI, Alejandro “Alito” Moreno con sus colegas del PAN y PRD, Marko Cortés y Jesús Zambrano en el reparto de candidaturas en otras entidades, aunque al parecer este fin de semana se habría destrabado luego de que acordaron postular para la jefatura de la Ciudad de México al panista Santiago Taboada.
Si sucede como se asegura acordaron las cúpulas partidistas, aunque en Jalisco siglaría el PAN, la candidata a la gubernatura sería la dirigente estatal del PRI, Laura Haro Ramírez. Pero esto se sabrá quizás hasta el miércoles cuando el tricolor abra el registro de sus aspirantes, pues también se manejó la posibilidad de buscar una candidata externa, fuera de los partidos políticos.
MC: A DEFENDER EL PODER
El arranque de precampaña de Jesús Pablo Lemus Navarro no fue el esperado para ser el candidato del partido en el gobierno, pues decidió hacerlo en Tepatitlán, tierra de sus ancestros maternos, sin evento multitudinario. Si bien se esperaba que aprovechara la oportunidad de hacerlo en Guadalajara, se interpretó como un mensaje de la urgencia de salir de la zona metropolitana al resto del estado donde es poco conocido y le es urgente establecer enlaces, para lo que ha requerido del apoyo de Esquer Gutiérrez quien como secretario de Asistencia Social estableció una amplia red de alianzas a lo largo y ancho del estado.
Mientras tanto, en la casona de la avenida La Paz, sede de MC, se inició el registró de precandidatos a los diversos cargos de elección popular en disputa, aunque algunos de ellos antes realizaron una “pasarela” en Casa Jalisco donde recibieron la “bendición” del gobernador Enrique Alfaro Ramírez, como sucedió primero con el propio Lemus Navarro, seguido de Verónica Delgadillo, que busca la alcaldía de Guadalajara; Quirino Velázquez, que busca suceder a Salvador Zamora en Tlajomulco; Juan José Frangie que apuesta por la reelección en Zapopan; Mirza Flores, que contenderá por un escaño en el Senad; y el mismo Alberto Esquer que peleará una senaduría. Extrañamente no recibió a Citlalli Amaya, aspirante a reelegirse como alcaldesa de Tlaquepaque.
Fuera de todos los mencionados, ya no recibió a nadie más, luego de que se criticó que Casa Jalisco fuera utilizada como casa de campaña o sede alterna del partido naranja.
En Guadalajara, Delgadillo García no parece tener tarea fácil para retener el poder de Movimiento Ciudadano en Guadalajara, pues si bien ha recibido en redes el apoyo de algunos que buscaron la misma candidatura, otros no se han pronunciado a su favor y han hecho el vacío. Incluso, el diputado federal Salvador Caro ha enviado varios amagos en sus redes sociales que provocan varias interpretaciones que no son, precisamente, de unidad o de respaldo a Verónica Delgadillo.
SOLITARIO. Sin alianza alguna Movimiento Ciudadano se prepara para buscar refrendar el triunfo del 2018.
«con mucha alegría, pero también con mucha humildad, entiendo la enorme responsabilidad que representa este registro, porque este registro no es una persona, no es sólo de Pablo Lemus, esto es fundamental entenderlo, esta precandidatura representa un gran proyecto político que inició en jalisco desde el año 2012, decir la representación de un proyecto colectivo»
Pablo Lemus / candidato a gobernador en jalisco.
En Zapopan, Frangie Saade enfrentará el desgaste natural de gobernar varios años el municipio, aunque él apenas cumplirá su primer trienio. Conocedor del terreno, Juan José ha realizado un buen gobierno, gracias además a la experiencia de haber sido jefe de gabinete durante las dos administraciones de Lemus Navarro, pero la demanda y la presión ciudadana se acumula a lo largo de los años, amén de que hoy la oposición se ha fortalecido, particularmente el partido Morena.
Pero será Zapopan, posiblemente, la tierra de la “guerra” crucial entre Movimiento Ciudadana y la mega alianza, pues se apuesta que el candidato de ésta última será el Pedro Kumamoto Aguilar, regidor de Futuro Jalisco, que se hizo acreedor a una andanada de críticas por la decisión de su partido de aliarse a Morena, el Verde y el partido del Trabajo. Para Kumamoto y Futuro, ganar Jalisco parece ser, incluso, una cuestión de orgullo.
Sin duda que nos falta aún mucho por ver lo que sucederá en la ex Villa Maicera.
En Tlaquepaque es el mismo tenor. Nueve años de gobiernos emecistas, pero principalmente de lo que se ha denominado el cacicazgo de la ex alcaldesa y hoy diputada federal, María Elena Limón García, podrían cobrarle la factura a Movimiento Ciudadano y sucumbir ante la mega alianza, dependiendo de quien postule como su candidato o candidata. A lo largo de estos años, el grupo de Limón García ha logrado tener el control político del municipio, sumando a quienes le son útiles, pero haciendo a un lado e, incluso, bloqueando a quienes observan como un riesgo o peligro para mantener ese control. Hay grupos políticos en el municipio que podrían darle “frescura” al gobierno emecista, como el del ex síndico David García, pero el férreo control de la legisladora federal impide que se sumen nuevos liderazgos.
Mientras tanto en Tonalá, Movimiento Ciudadano recurrió a las filas del ex priista Jorge Arana Arana, ex alcalde dos veces por el PRI y candidato perdedor a la gubernatura y a la presidencia municipal de Guadalajara, y postulará como candidato a su hijo Francisco. Los pronósticos no son lo más favorables para el partido naranja, pues además de que perdieron la fuerza que tuvieron en 2015, la división entre emecistas se mantiene, el desgaste del aranismo tonalteca podría perjudicarlos y volverse a quedar en la orilla.
En Tlajomulco, aparentemente no tendrían problema para mantener en su poder el gobierno, pero quizás ya no con la facilidad de elecciones anteriores. La complicación podría darse por la candidatura de Gerardo Quirino Velázquez, pero se espera que la fuerza del gobierno municipal y el trabajo del ahora alcalde con licencia, Zamora Zamora, podrían ser determinantes para el triunfo.
En el interior del estado aún no hay un panorama muy claro ante la falta de definición de candidatos, lo que se irá esclareciendo conforme pasen los días.
Pero lo que sí es cierto es que a diferencia de procesos electorales anteriores, hoy Movimiento Ciudadano no puede presumir de unidad y cohesión interna, aunque se advierte que será menos complicado lograr la unidad necesaria para levantarse con la victoria, que en partidos como Morena y quizás del Frente Amplio por Jalisco.
MORENA: ¿CUMPLIRÁ PRONÓSTICOS?
Para no pocos, hoy Morena tiene amplias posibilidades de ser competitivo y forzar un empate técnico con Movimiento Ciudadano en la lucha por la gubernatura, pero siempre y cuando logre lo que, eso sí, para muchos es una utopía, algo más que imposible: la unidad interna.
No se puede hablar de candidaturas a las presidencias municipales ni a las diputaciones si antes no se analiza y estudia cuidadosamente lo que ha sucedido en torno a quien resultó electa coordinadora de los comités de defensa de la cuarta transformación en Jalisco, Claudia Delgadillo González, y cuya elección no ha sido bien asimilada por diversos grupos al interior de Morena, pues siguen sin entender que la definición se dio en función de la regla de género, al igual que sucedió en la Ciudad de México y donde quedó fuera nada menos que el candidato “favorito” de Sheinbaum: Omar García Harfuch.
Aquí en Jalisco ha costado trabajo que grupos de morenistas acaben de aceptar la decisión de la cúpula de su partido de postular a Delgadillo González quien, en cambio, ha sido muy bien “cobijada” por su partido Verde Ecologista y demás aliados: el Del Trabajo, Hagamos y Futuro. Con el paso de los días se confirmará si la visita de Sheinbaum Pardo a Jalisco el sábado pasado tuvo o no alguna consecuencia para el cierre de filas en torno a su candidata.
A decir de algunos analistas, para que Morena mantenga la competitividad, su virtual candidata a la gubernatura debe “tejer fino” para sumar adhesiones de quienes quedaron “heridos” por su nominación, reconocer el peso que cada liderazgo o grupo tiene al interior de Morena y, por supuesto, de sus partidos aliados; y, quizás lo más importante, saber integrar un verdadero equipo de asesores serios y profesionales que no se dediquen a hablarle “bonito” al oído, sino que elaboren una estrategia de campaña y la sepan implementar a lo largo y ancho del estado.
UNIDAD. Morena enfrenta el reto de lograr la unidad en torno a sus candidatos o volverá a quedarse “en la orilla”.
LA HISTORIA NOS PUSO HOY A DOS MUJERES QUE NOS LLAMAMOS CLAUDIA EN EL CENTRO DE LA HISTORIA DE JALISCO PORQUE LES VOY A DECIR ALGO, ESTA COALICIÓN, ES UNA ALIANZA CON EL PUEBLO DE JALISCO”
CLAUDIA SHEINBAUM / COORDINADORA NACIONAL DE LA DEFENSA DE LA CUARTA TRANSFORMACIÓN
Agregan que Claudia Delgadillo y su equipo no deben minimizar ni menospreciar a ninguno de quienes fueron sus adversarios o a quienes se hayan resistido a su nominación, sino que deben de tener la inteligencia de ofrecer apertura y atención, porque a final de cuentas de todos va a necesitar y es mejor tenerlos de aliados que de adversarios.
Mientras tanto, aspirantes a las alcaldías se apuntaron para entrar a la contienda: Mariana Fernández y María Padilla, buscan la candidatura de Guadalajara, al igual que Salvador Hernández. En Zapopan aun se mueve por la candidatura el regidor Alejandro Puerto, pero se asegura que ese espacio está reservado para Pedro Kumamoto. Mientras que para Tlaquepaque trascendió que se habría registrado el ex alcalde priista Alfredo Barba Mariscal -aún sin confirmar-, si el candidato fuera hombre, pero también la exdiputada Erika Pérez que fue de las consejeras estatales más votadas, y se habría registrado también la diputada Laura Imelda Pérez, quien había levantado la mano para la Senaduría.
En Tonalá la fila de aspirantes comienza con el propio presidente municipal, Sergio Chávez, quien busca la reelección, así como las regidoras Liliana Flores Olea y Marta Arizmendi, entre otros.
Para el resto de los municipios metropolitanos y del resto del estado aún no hay nada definido o señales que pudieran aclarar el panorama de aspirantes, y cada día son más los que levantan la mano para una alcaldía o una diputación federal o local.
Mucho tendrá que hacer Morena, concretamente, para evitar una desbandada que pudiera ser de fatales consecuencias, y aún más su coordinadora Claudia Delgadillo para sumar a todas las expresiones.
SUSPENSO. El Frente Amplio por Jalisco decidió postular a una mujer por la gubernatura, pero aún no define el nombre.
FAM: DE LO PERDIDO, LO HALLADO
El Frente Amplio por Jalisco, por su lado, no termina de dar señales de vida, pues luego de que se firmó la alianza y se registró ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana, nada se ha sabido más allá de que definieron que será mujer la que busque la gubernatura.
Al igual que en Movimiento Ciudadano y Morena, el Frente no puede presumir de unidad, comenzando por algunas diferencias que han trascendido entre las dirigentes de los partidos, pero la división se advierte más al interior de los partidos Acción Nacional y Revolucionario Institucional. La lucha interna por las candidaturas a las alcaldías y diputaciones evidencian dichas diferencias que podrían dar al traste con la posibilidad de ganar terreno, principalmente fuera de la zona metropolitana de Guadalajara.
Lo bueno o malo de esta alianza -según el cristal con que se mire-, es que todas sus acciones y decisiones están supeditadas a sus dirigencias nacionales que no terminan por ponerse de acuerdo en torno a la definición de candidaturas a los gobiernos estatales en juego, salvo en algunas entidades como en la Ciudad de México donde se acordó la postulación del panista Santiago Taboada, lo que provocó una fractura en el PRI de “Alito” Moreno.
Aquí en Jalisco habrá que ver las reacciones que provoque la designación de su candidata, pues de acuerdo a lo que se conoció en los corrillos panistas el fin de semana anterior fue que al quedarse el PAN con la candidatura de la capital del país, las “fichas” se mueven y cabe la posibilidad de que la candidata sea la presidente del PRI, Laura Haro Ramírez, como se había contemplado inicialmente, antes de que se les moviera el mapa de precandidaturas.
Queda descartado que si la candidata al gobierno es alguna de las dirigentes de partido, las demás queden inconformes y eso ponga en riesgo la alianza, porque hasta ahora se ha visto disciplina partidista en cada una de ellas, y una camaradería que permitiría sortear cualquier diferencia de momento.
Pero así, al no tener definición en la candidatura al gobierno estatal, es que se encuentran “congeladas” todas las demás candidaturas a las presidencias municipales y diputaciones, y los y las aspirantes a dichos cargos han tenido que contener sus ansias y esperar que bajen las instrucciones de las cúpulas de sus respectivos partidos.
Seguramente en esta semana podría quedar definido el nombre de la candidata a la gubernatura y, entonces sí, comenzar el desfile de aspirantes al Senado, a las diputaciones federales y locales, y las alcaldías.
Mientras eso no suceda, el Frente Amplio por Jalisco estará perdiendo un tiempo que si bien no es definitivo, sí hubiese servido para hacer acto de presencia entre el electorado.
FUTURO. Andanada de críticas recibió Pedro Kumamoto por su alianza con Morena por la gubernatura.
«La alianza con Morena tiene un costo político, pero estoy dispuesto a pagarlo»
Pedro Kumamoto / regidor de Zapopan.
UNIDAD, EL “TALÓN DE AQUILES”
De acuerdo a como se han registrado los hechos, en Jalisco los partidos políticos -en alianza o no- enfrentan un problema común que cada uno tendrá que resolverlo de la manera que mejor crea conveniente: la falta de unidad, principalmente en torno a quienes hoy han sido designados sus candidatos a la gubernatura.
En Movimiento Ciudadano y en Morena, particularmente, la división y las diferencias internas son más que evidentes y tendrán que trabajar en ello antes del arranque oficial de las campañas electorales, aunque se pretenda ofrecer otro panorama en las redes sociales.
Futuro Jalisco se “fracturó” tras la decisión de aliarse con Morena, el Verde Ecologista, el Partido del Trabajo y Hagamos. Aparentemente la “rebelión” fue sofocada por la dirigencia estatal, pero habrá que esperar a que transcurra el tiempo para confirmarlo.
Será también cuestión de esperar a cuando se definan las candidaturas del Frente Amplio por Jalisco para saber si los protagonistas quedan conformes con las decisiones de sus dirigencias o tomarán distancia y buscarán espacio en otros partidos.
El tiempo será el que tenga la última palabra para advertir lo que puede venirse en el 2024.
